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sobreviviendo al invierno danés...



Es Diciembre en Dinamarca, esta semana la temperatura promedio fue de 0°.

El sol sale a las 8:45 y se pone a las 15:40.

Nosotros llegamos a este país en el inicio del verano y tuvimos la suerte de vivir con daneses los primeros 5 meses. Cuando conversábamos del miedo que nos daba el invierno nórdico ellos nos decían que lo peor era la oscuridad, que el frío se toleraba. Que era mejor si nevaba, porque sino el invierno es gris y lluvioso, y aunque hace mucho frío se pierde la poesía que este podía traer con lindos paisajes.

Veníamos "bien", terminaba octubre y parecía que lo teníamos bajo control. Entonces, llega noviembre y con el "cambio de hora" (por el ahorro de energía) perdimos la última hora de luz del día. Unas semanas después me encontraba a mi misma cansada, agotada aún sin haber hecho demasiado en el día, de mal humor y físicamente como trabada. La sensación de despertarte a oscuras ya me era familiar de mi vida en Argentina, pero sentir que cuando tu día está empezando a ponerse productivo ya es de noche de nuevo fue una experiencia totalmente diferente.

Contracturas, ganas de dormir a las 5pm, una dosis extra de PMS, más fiaca que la de costumbre y muchas ganas de hacerte un bollito en la cama y no parar de ver películas.

Semanas alentadoras con todo el invierno por delante, como podrás imaginar.

Fue entonces, cuando empecé a acordarme de las recomendaciones, estrategias y recursos de los que nos hablaban nuestros convivientes daneses en el verano.

De las velas, las luces, las salidas al sol, los buenos abrigos.

Para ser honesta debo decir que aunque no llegué a incorporar todas las recomendaciones; solo tener algo concreto que podía hacer, cambió la manera de encarar esos días de 7 horas que nos estaban esperando.

Pensando en eso decidí (en un domingo de frío y fiaca) repasar los aprendizajes hechos, los recursos que hay a mano, las opciones que nos fueron compartiendo para suplantar un poco ese sol que tanto falta. Son todas maneras danesas, consejos que nos han dado, cosas que fuimos aprendiendo en el camino y que , básicamente, se pueden resumir con la idea de crear y mantener el HYGGE.

Si nunca escuchaste hablar de esta palabra, es el momento de googlearla. Hace unos años se viene haciendo conocida como la fórmula de la felicidad danesa , y no sin motivo.

Hygge no tiene traducción directa en ningún otro idioma, y significa algo como comodidad, calidez, intimidad. Para mí habla de un "clima" que se genera cuando se la pasa bien, en confianza, placenteramente.

Esta época del año es la que más necesita de estas acciones, el escenario con el que empiezo este artículo es el motivo exacto pro el que los daneses durante siglos se ocuparon de habitar los días más cortos del año con las tradiciones más cálidas. Navidad es la cumbre del hygge, en esta fecha las tradiciones bien usadas ayudan a acortar este invierno que parece eterno.

Aquí comparto algunos de los elementos clave asociados al "hygge", que pueden ayudarte a colorear esta (probablemente gris) Navidad que se acerca:

  • Buena iluminación (si ya estás en Dinamarca, has notado que cada habitación tiene una iluminación especial, la elección de las lámparas, la intensidad. Para un danés, un foco colgado en el medio del techo es razón suficiente para querer irse de una habitación.)

  • Muchas velas (los daneses son los mayores consumidores de velas per cápita del mundo, la mayoría prende velas - en plural- a diario)

  • Mantenerse juntos (reuniones a cenar planificadas con tiempo, quedándose a dormir para no tener que salir en medio de la noche. Encuentros de calidad, con tiempo, mantener las amistades de siempre, darle lugares especiales a las nuevas.)

  • Comida de temporada, cocinada entre muchos (mantener "rituales" de comidas típicas, encargarse de juntarse en las fechas correctas para prepararlas juntos)

  • Ropa cómoda y calentita para estar en casa (medias de lana, pantuflas y una buena manta son infaltables)

  • Buen abrigo (Si le hablás de frío o mal clima a cualquier danés, probablemente lo primero que respondan es que no hay mal clima, sino ropa que no es la adecuada)

  • Furniture porn (decorar, elegir, ambientar: los daneses pasan tanto tiempo en los interiores que se convirtieron en maestros de decoración. Cualquier casa, por más simple que sea va a tener algún detalle de diseñador, un cuadro que se luzca, una alfombra en la que quieras quedarte tirado).

  • Un "lugar hygge" (generalmente es un sillón muy cómodo, cerca de una ventana, en el que te podés sentar a ver el frío desde adentro, idealmente con una bebida calentita y un libro de esos que se disfrutan)

Si prestás atención, cada punto se puede convertir en una sugerencia, un tip, un recurso para hacer de esta temporada algo más agradable.

Comprar una vela, sentarte frente a la ventana con un buen mate, juntarte con amigos y pasar un fin de semana cocinando y charlando, leer un buen libro. Hygge se trata de incorporar esas acciones que son lo suficientemente pequeñas para que no nos agobien y a la vez lo suficientemente significativas para que cambien una manera de estar.

¿Habías escuchado antes algo de "Hygge"?

¿Qué otras estrategias para "pasar el invierno" has aprendido en este tiempo?

Podés elegir uno de estos puntos y aplicarlo esta semana de previa navideña, algo simple y que te motive. Y te invito a que me cuentes en el grupo de facebook Vidas Viajeras , qué tanto Hygge pudiste incorporar en tus fiestas.

Valentina.


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