top of page
Buscar
  • Foto del escritorValentina

turista, viajera, nómada



Hace desde mis 20 que viajo "de mochila" y a mis 25 fue que salí sin fecha de vuelta.

Desde que empecé a nadar estas aguas me encantó diferenciarme del chinito en tour grupal o de la joven saltando para la foto en la playa.

Primero me definía como "mochilera" y más adelante, a medida que tomaba coraje y sumaba kilómetros, pasé a ser "viajera" y hasta "nómada". En todo caso lo importante era diferenciarme del y de la turista clásicos.

Las estrategias para mantenerme en estas categorías fueron siempre buscar el transporte más local, el alojamiento más barato, la caminata menos conocida. Y debo decir que haciendo las cosas así llegué a conocer rinconcitos impensados, hablar con gente increíble, comer comida de lo más sabrosa. Anduve por trenes de India hablando con locales hasta la madrugada, hice la única "great walk" de Nueva Zelanda que nadie conoce, comí de la mejor comida en los barrios más heavy de Puebla en México. Y me encantó.

De todas maneras, con el tiempo me vengo dando cuenta que ninguna de esas tres maneras de hacer las cosas me hacían menos extranjera, argentina, mujer, blanca. Y hoy en Marruecos, me doy cuenta de que aunque intente dar con el transporte local, probablemente me van a seguir cobrando el doble y hasta me van a dar el mejor asiento.

Por más que lo intente, en mis 20 días acá estoy lejos de hacer una vida mas local que la que puede hacer cualquier otro turista de por ahí. Y eso, por supuesto, me genera sentimientos encontrados.

Debo reconocer que pasé una buena parte de esta semana pensando ¿Me habré puesto vieja? ¿ A esto se referían mis viejos cuando me decían "aprovecha a hacer esos viajes ahora, que en unos años las cosas cambian"? ¿Ahora me tengo que resignar a ser turista y nada más?.

Hasta que en un momento, me dí cuenta de que TURISTA es justamente una palabra que vendría a definir algo, y cuando la sacudí un poco de mis ideas anteriores, me di cuenta que no sabía exactamente qué venía a definir (salvo que era lo contrario a ser viajero de verdad o algo así). Y ahí acudí a mi biblia nerd: el diccionario.

Ahí, la sabiduría popular (vía google) me dice entonces que turista es quien viaja por placer.

Entonces, con esta nueva versión de una palabra manoseada me animo a decir ¡claro que soy turista!. Quizás no full time pero seguramente de a ratos es el placer de viajar lo que me motiva y me llena.

Y claro que soy viajera, y por supuesto a veces mochilera y un poco nómada. Sólo que voy eligiendo qué traje ponerme cada vez; para aprovechar los lugares siendo honesta ( o al menos intentando serlo) con lo que busco, lo que hago y lo que soy en ese camino particular.

No hace falta saberlo todo, ni se debe hacer de una única manera; tenemos que recordar que esas palabras son como "trajes" que podemos elegir y cambiar a medida que vamos andando para ir tan cómodas como lo necesitemos.

A veces hay palabras que se nos oxidan en el uso repetido, y al final ni sabemos qué significan. Y hay que tener cuidado con eso porque repetirlas sin saberlo tiene sus consecuencias en nuestros viajes. Y acá repito una especie de mantra que intento incorporar cada vez más : hay tantos viajes como viajeros, tantas maneras de viajar como viajeras dando vuelta.

Y no podemos dejar que definiciones importadas nos digan si somos o no dignas de ser llamadas de ciertas maneras.

Ahora, con casi treinta años, me encuentro a mí misma en Marruecos,


33 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page